COMUNIDAD APOSTOLICA Y PROFETICA

HIJOS PRIMOGENITOS DEL APOSTOL RONY CHAVEZ
BAJO LA COBERTURA DEL APOSTOL RONY CHAVEZ

jueves, 6 de enero de 2011

NOTA


I TESTIMONIO APOSTOLICO
Por el Apóstol Rony Chaves
Fui desatado al Ministerio del Evangelista en forma plena a través del Apóstol Delio Zuluaga casi venticinco años atrás. Estaba ejerciendo para esos días mi papel de Evangelista pero sin reconocimiento apostólico. El hno. Delio fue usado por el Señor como Profeta y Apóstol para marcar mi vida y desatarme al Ministerio con Dimensión Apostólica y Profética. La profecía e imposición de manos de él y del Presbiterio me introdujo a un caminar apostólico de casi un cuarto de siglo ya. En el año 1982, tomé el pastorado del Centro Cristiano de San José y fui instalado en el mismo de manera oficial en mayo del año 1983. Desde ese entonces funcioné como Pastor y Evangelista. Para ese mismo año, Dios usó al Apóstol Luis Mercedes para declarar sobre mi palabra de ciencia que me otorgaría el llamado al oficio del Maestro de la Iglesia. Desde esa misma época me fue impartida una unción para escribir al pueblo del Señor los temas de la palabra de Revelación y Restauración. Pasaron unos meses más y estando en Guatemala en febrero de 1985, el Señor se me manifestó sobrenaturalmente en mi cuarto de hospedaje nombrándome con Su voz audible como un Apóstol de Jesucristo. El llamado al oficio apostólico fue confirmado en la Iglesia Elim de la ciudad capital guatemalteca cuyo Apóstol era el Dr. Otoniel Ríos Paredes. El fue el hombre usado por Dios para profetizar y confirmar mi vocación apostólica, mientras me presentaba a la gran audiencia para ministrarles como su predicador invitado. Al regresar a Costa Rica, nuestra Congregación tomó un rumbo distinto. Decidimos en forma unánime tomar como forma de gobierno el modelo apostólico del Reino de Dios. La teocracia sería nuestro sistema de gobierno. Amén. En abril de 1989, Dios me concedió el privilegio de predicar la Cruzada "Un Milagro en tu Vida", actividad evangelística que ha reunido la concentración de personas más grande en la historia evangélica de Costa Rica. Al final de la misma, el 18 de Abril, el Señor me ungió como Profeta y me envió como tal a las Naciones. Aleluya. He caminado en el campo apostólico por casi venticinco años y como Apóstol por casi veinte, esto me ha permitido ver el mover del Espíritu Santo para restaurar la dimensión apostólica en el Cuerpo de Cristo. Desde los años 70, vi en acción el oficio del Apóstol. Esta función se ejercía de una forma muy particular, un Apóstol era sobre toda una nueva agrupación de iglesias y ministros, y nadie más podía ser llamado Apóstol, excepto él. Yo podía discernir a muchos hombres con llamado apostólico pero ese "nuevo odre" de la era neo-pentecostal no permitió más Apóstoles en una misma organización. Esto es lo que el Dr. Peter Wagner llama hoy, Apóstoles Verticales. Ellos imponen su autoridad única de arriba hacia abajo, al igual que una misma visión y forma de operar. Todavía hoy en el 2003, este tipo de líder apostólico tiene amplias coberturas sobre muchos ministros. En mi opinión, ellos deben abrirse a que surjan de sus ministerios otros apóstoles-hijos para que se diversifique la unción y los dones en sus movimientos. Por mandato divino, yo opté por no crear un nuevo movimiento, organización o denominación moderna. Dios me llamó a ser un Apóstol Horizontal. Mi deber sería formar hijos del ministerio y desatarlos para levantar iglesias e implementar la visión dada por Dios a ellos. Mi labor sería por casi veinte años la de formar, entrenar y crear relaciones ministeriales con líderes apostólicos y proféticos del Señor. Tuve la gran bendición de Dios de integrar equipos apostólicos en el pasado dirigidos por hombres de gran experiencia como Allan Vincent de Inglaterra, Rick Godwin y Bob Nichols de E.U.A. y otros de quienes aprendí muchos en los últimos años de los 80 y principios de los 90. Dios usó a estos hombres y muchos congresos en los que ministramos juntos para crear en mi la firme convicción de que el cuerpo de Cristo, necesita de sus Apóstoles y Profetas hoy y de que ellos unidos les ministren a través de ungidos equipos apostólicos. Dios nos dio la honra de ser pioneros en América Latina en el área de la restauración de verdades perdidas y como resultado de recibir dichas revelaciones en los años 80, formamos R.A.M.C.U. (Red Apostólica de Ministerios Cristianos Unidos) una Red Ministerial para brindar cobertura a ministros hijos y compartir la palabra fresca del Espíritu. A esta Red no le dimos fuerza sino hasta 1999 cuando el Apóstol John Kelly nos animó a trabajar por la búsqueda y levantamiento de apóstoles en las naciones. El Señor me había enseñado en la práctica la existencia de los cinco ministerios, la restauración del ministerio del Apóstol y de los Equipos Apostólicos. Esos eran la semilla para fortalecer una gran Red Apostólica por el mundo. Aleluya. De un Apóstol se formó un Equipo Apostólico y de este una Red Apostólica-Profética. R.A.M.C.U. tiene hoy ministerios bajo cobertura, asociados y amigos en más de veinticinco países de América y Europa. Cubrimos de manera directa o indirecta a casi mil ministerios e iglesias y a un número de Apóstoles superior a cincuenta. Alabado sea Dios. El Dr. Peter Wagner afirma que es difícil que un Apóstol y su Red puedan cubrir y brindar una cobertura responsable a más de cien o ciento cincuenta ministerios. Personalmente creo que esto es verdad, la respuesta de este crecimiento de relaciones tan acelerado es el de reconocer nuevos apóstoles nacionales y animarlos a crear sus propias redes para cubrir en su propio territorio y área de influencia a muchos otros ministros e iglesias. R.A.M.C.U. desde hace casi un año, tomó el rumbo de ser una Red de Redes Apostólicas, o sea, una Coalición Apostólica de Ministerios. En esta Coalición, estamos formando Redes Apostólicas Nacionales con Apóstoles de la región para hacer una gran Red Apostólica del Reino de Dios.

Posiblemente en el futuro, mi trabajo apostólico sea brindar cobertura o asesoría y consejo sólo a Apóstoles y Profetas.
Ellos serán quienes en sus propias redes, brinden cobertura y consejo apostólico a sus hijos de ministerio e iglesias

Como un Profeta y Apóstol del Señor, veo que el paso siguiente en las naciones, es además de reconocer y establecer Apóstoles, es ayudarles a consolidar sus redes ministeriales y unirlos luego en Coaliciones Apostólicas de las cuales surgirían los consejos de Apóstoles Nacionales y Regionales. Esto son las nuevas Fraternidades o Alianzas Ministeriales Apostólicas que tomarán la nueva fase de crecimiento de la Iglesia del Señor. REDES APOSTÓLICAS O MINISTERIALES En este Tercer Milenio de Guerra Espiritual Estratégica, debemos unirnos como nunca antes.                                                                                    Solamente enlazados en Redes Apostólicas o Ministeriales, podremos traer gobierno de Dios con poder a la tierra y así derribar las fortalezas del diablo. Las redes unen a los líderes apostólicos, quienes son constructores del Reino

Hombres claves que son influenciadores apostólicos de las ciudades para que juntos podamos traer las estrategias del Señor y unificar el trabajo en la guerra final contra los poderes del mal. La fuerza unida de nuestra unción, sabiduría, conocimiento y entendimiento, acabará mejor el trabajo que si lo hacemos separadamente.
VISION Y PROPÓSITO En el caso de las Redes Ministeriales y Coaliciones Apostólicas, estas son sus metas principales: 1-Establecer y fortalecer el Reino de Dios:
a- Alcanzando ciudades y territorios para Jesús. b- Alcanzando naciones. c- Plantando iglesias en territorios de gente no alcanzada con el evangelio.                                                                                                                                                                                                                         2-Establecer y fortalecer ministerios a través de: a- Comunión y edificación ministerial. b- Educación y enseñanza de alto nivel. c- Intercambio de ideas e información ministerial. d- Ministración personal. e- Reconocimiento ministerial (lo que se llamó ordenación). f- Conferencias, seminarios, retiros. g- Apoyo, cobertura o supervisión. 
¿QUIÉNES PUEDEN FORMAR PARTE DE UNA RED APOSTÓLICA?                                                                                                                                                                                                          En el caso de una Red como R.A.M.C.U. cuyo propósito además de crear relaciones ministeriales, reconocer ministerios y brindar enseñanza apostólica, también está el establecer Apóstoles en las naciones, los miembros pueden ser:
1- Pastores y Maestros (según Efesios 4:11). 2- Evangelistas y Profetas (según Efesios 4:11). 3- Apóstoles (según Efesios 4:11): a- Apóstoles Verticales: Estos son líderes de otras redes apostólicas o líderes de grupos de iglesias o de alguna denominación o concilio. b- Apóstoles Horizontales: Aquellos que son voces de influencia en el poder apostólico para convocar, movilizar y relacionar al liderazgo de las naciones. c- Apóstoles con ministerio múltiple: Estos son Apóstoles-Profetas; Apóstoles-Evangelistas; Apóstoles-Maestros; Apóstoles-Pastores, etc. 4- Alcanzadores de ciudades: a- Directores de Ministerios Paraeclesiásticos. b- Líderes de grupos independientes. 5- Constructores del reino: a- Líderes de alabanza (Salmistas y Directores). b- Líderes de Grupos de Intercesión. COALICIONES DE APÓSTOLES En el caso de tener una Coalición Apostólica formada, los miembros solo deben ser Apóstoles en función, aunque los propósitos son realmente los mismos de una Red. Nuestra meta fundamental es el Reino de Dios. Amén. BENEFICIOS Redes y Coaliciones son importantes porque están orientados para edificar a los ministerios y líderes afiliados a cada una. Estos son algunos beneficios que brindan: 1- Relaciones de compañerismo y sociedad. 2- Boletines o revistas periódicas que nos mantienen al tanto del mover de Dios. 3- Invitaciones a conferencias o eventos apostólicos durante el año. 4- Enseñanzas apostólicas que fortalecen la visión ministerial. 5- Asesoría ministerial. 6- Cobertura ministerial en muchos casos. 7- Consejos de Equipos Apostólicos. 8- Apoyo pastoral. 9- Invitación a retiros con grupos selectos y pequeños de ministros apostólicos. 10- Apoyo e intercesión profética. 11- Presbiterios Proféticos y Apostólicos. 12- Oportunidad para crear amistad con otros ministros.                                                                                                                                      LOS ANCIANOS DE LA CIUDAD Por algunos años enseñamos sobre la importancia de que la Iglesia regionalmente reconociera a su liderazgo maduro, aquellos ministros que fuesen considerados como "ancianos" de la cuidad. Por años, la Iglesia ha tenido una organización pastoral, basada en relaciones pastorales casi exclusivamente. Hemos tenido las denominadas Alianzas, Unidades o Fraternidades de Pastores. Esta forma de organizarnos y trabajar ha sido muy buena, efectiva e influenciante, pero no suficiente. Necesario es mirar con ojos más abiertos hacia la visión apostólica del Señor. Esta nos lleva sin duda hacia la creación de un Consejo de Ancianos de la Ciudad. Este Consejo de Ancianos debe estar formado por los ministros más reconocidos (no digo famosos) respetados y con más fruto y trayectoria. Estos deberían ser Pastores-Apóstoles para una mejor función. Como nuestro funcionamiento ha sido a través del modelo pastoral, sólo hemos tenido pastores en estos grupos, de los cuales muy pocos han sido apostólicos, es decir, que creen en la operación hoy de los cinco ministerios de Efesios 4:11. De todas maneras solo conozco tres o cuatro ciudades que han tomado esta idea de establecer Ancianos de la ciudad. Una de estas ciudades es Cali en Colombia. Este Grupo o Consejo de Ancianos ha sido ejemplar para el mundo. A través de ellos han fortalecido la unidad de la Iglesia y han unido a miles de creyentes en oración derrotando las fuerzas del mal contundentemente. Yo diría, porque conozco algunos de estos ancianos de Cali que son la mayoría Apóstoles. Creo que estos Consejos de Ancianos de la Ciudad son el embrión de lo que hoy hablamos "Consejo de Apóstoles". EL CONSEJO DE APÓSTOLES Cuando una ciudad, territorio o nación, reconoce la existencia y operación del ministerio del Apóstol, veremos a Dios organizarnos de manera apostólica. Un Consejo Apostólico reúne a los Apóstoles verdaderos para ministrar y bendecir un territorio a través de la unción particular entregada por Dios a ellos. Un Consejo de Apóstoles no pretende anular las Alianzas de Pastores ni de Evangelistas, sino fortalecerlas. Un Consejo de Apóstoles existe para: 1- Reunir a los Apóstoles de una región. 2- Reconocer a los Apóstoles que van emergiendo. 3- Reconocer y desaprobar a los falsos Apóstoles. 4- Tejer relaciones de amistades entre ellos. 5- Establecer cobertura espiritual. 6- Establecer decretos apostólicos. 7- Edificar juntos el Reino. 8- Planificar la intercesión unida. 9- Establecer estrategias de alcance evangelístico. 10- Establecer Presbiterios Apostólicos y Proféticos. 11- Enseñar la Palabra Apostólica. 12- Para defender la fe y la doctrina. 13- Establecer ministerios. 14- Apoyar el levantamiento de los Profetas y reconocerlos. 15- Traer la voz del Señor a la zona. 16- Unir iglesias, ministerios y recursos para extender el Reino. 17- Compartir información apostólica. 18- Fortalecerse mutuamente. 19- Establecer la agenda del Espíritu. 20- Extender la visión de Dios. TRANSICIÓN DE LO PASTORAL A LO APOSTOLICO                                                                                                                                                                                                                                       El reformador escocés Juan Knox dijo: "En este punto nunca podrán nuestros enemigos hacernos desmayar de lo que ha sido nuestra primera petición, que el rostro santo de la Iglesia Primitiva y Apostólica volviese a aparecer otra vez a los ojos y el conocimiento de los hombres".                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                             He observado en los últimos veinticinco años de mi vida cristiana que muchísimos pastores y líderes cristianos desean una transición del llamado pastoral al llamado apostólico. Ellos deberán vencer en el camino prejuicios religiosos, doctrinas denominacionales y teologías anti-apostólicas. En este Tercer Milenio hay un cambio en el liderazgo tomando lugar en el cuerpo de Cristo, globalmente. El cambio es de lo Pastoral a lo Apostólico. Iglesias, líderes y ministros necesitan con urgencia hacer este cambio para que las iglesias puedan moverse al próximo nivel de poder, de gracia y de unción. Esta transición debe ser hecha con cuidado y entendimiento. Hemos sido educados por años hacia un modelo pastoral de funcionamiento y ha llegado la hora de hacer los cambios hacia la nueva Dimensión Apostólica para la Iglesia del Señor. Son días de Reforma y necesitamos revisar la doctrina apostólica y buscar el Consejo de Apóstoles maduros. El cambio debe ser realizado todos juntos: congregaciones y líderes. Estoy seguro que el Espíritu Santo hará de su Iglesia una verdadera Iglesia

1 comentario:

  1. Hola.Buenas tardes.Me pueden enviar una bendición RHEMA una palabra de bendicion Bendiciones.Que sea mediante mensaje de texto.Bendicione.Jorge Luis Ayala Valentin.

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